lunes, 18 de septiembre de 2017

Tito Avilés, el “cabecita de oro” de Aurora



Tito Avilés Quintela, cochabambino de cepa y aurorista de sangre, también conocido como “Cabecita de Oro” es uno de los principales goleadores y referentes que tuvo el cuadro popular, además de Litoral de La Paz y Tránsito del valle.

Su apodo lo ganó debido a su potente remate de cabeza y, pese a su baja estatura, siempre superó en salto a los zagueros para vulnerar las redes rivales.

Profesor de Educación Física de profesión, Avilés también fue atleta en su juventud.

“Desde muy pequeño comencé a practicar este deporte y debuté jugando en el club Aurora (1967). Yo siempre fui celeste, desde Juvenil A y Juvenil B. Debido a que tenía que ir a estudiar en el Insef (Instituto Nacional Superior de Educación Física) de La Paz, viajé a dicha ciudad pero el plantel valluno no quiso dar mi pase, pero no sé como los tricolores (Litoral) lo lograron y de esa manera jugué durante tres años en este equipo (1971-1973). Después retorné a Cochabamba luego de salir profesional y me contrató el club Tránsito (1974-1976) que armó un buen plantel reforzándose con buenos jugadores como Mario Pariente, Nicolás Linares y otros”, recordó Avilés.

Más allá del dinero, Avilés indicó que en su época pesaba más el amor a la camiseta que un sueldo alto.

“Antes ganábamos 150 pesos al mes. El sueldo era el mismo para todos. No es como ahora donde ganan 500, 20.000 dólares. No había antes eso. En Litoral me dieron ítem de subteniente y cerca a 2.000 bolivianos me pagaban, además tenía asegurada mi papeleta de la Caja (Nacional de Salud)”, dijo Avilés.

Pese a que jugó poco tiempo al fútbol y luego se dedicó plenamente a su carrera y la familia, Avilés marcó época en los tres clubes, pero mucho más en Aurora, su gran amor.

“Dejé muy joven el fútbol (29 años) y no quise seguir. Ya era profesor de Educación Física y dije que quizás me lastiman, me quedo cojo o quedo con algún defecto y no podré ser ni jugador ni profesor”, afirmó.

Figura celeste

Goleador en Aurora, Avilés guarda los mejores recuerdos del club, pero quedó pendiente algo: ser campeón.

De aquel Aurora de los años 60 recuerda con mucho cariño a sus compañeros de plantel: José Issa, Mario Pariente, Adolfo “Palillo” Foronda, Ramiro Rodríguez, Freddy Vargas, entre otros.

Con la camiseta de su gran amor tuvo la oportunidad de jugar dos amistosos ante equipos internacionales: Portuguesa y Vasco da Gama.

Ante Portuguesa, elenco que llegó en 1967 con Garrincha, Aurora perdió 1-2 y Avilés marcó el gol del descuento. Con Vasco da Gama igualaron 1-1 y también dijo presente.

“Perdimos con Portuguesa y yo hice el gol. Luego empatamos con Vasco da Gama y también anoté. Lo hice de cabeza. No había un partido en el que no anoté en ese tiempo”, afirmó Avilés.

Además, el gran goleador popular narró otras anécdotas. La primera, que le hizo goles a todos los equipos que enfrentó. Los hizo ante Wilstermann, Ayacucho, Bata, Petolero, Municipal y New Players.

La segunda anécdota es el encuentro de 1967 ante Mariscal Santa Cruz, elenco que tres años más tarde se consagró como campeón de la Recopa Sudamericana.

Del averno, Aurora pasó al cielo en tres minutos. Avilés aportó en el triunfo 3-2 sobre el Cardinal, en una memorable tarde el estadio Félix Capriles.

“En tres minutos ganamos 3-2. Ese equipo (Mariscal Santa Cruz) era la Selección Nacional. En ese equipo estaban Américo Díaz, Juan Farías, Remberto ‘Chembo’ Gonzales, Víctor Barrientos, Víctor Montoya, Víctor Agustín Ugarte. Fue un partidazo, ya que faltaban tres minutos y perdíamos 0-2, pero ganamos 3-2. Yo hice el primer gol de penal. Yo era el ‘penalista’, ya que nadie quería patear. Yo estaba mal porque me dieron una patada en la nariz. Me metieron tapones para que deje de sangrar de la nariz, fui y coloqué el 1-2. La gente ya se había salido, la general estaba vacía. Cuando se gritó gol, la gente volvió a llenar la grada. (Guido) Aguilar hizo el 2-2 y luego el 3-2”, relató emocionado Avilés.

Pero en el encuentro, Avilés tuvo un grato encuentro con el “Maestro” Ugarte, su rival esa tarde. El jugador tupiceño le tocó cabeza constantemente y le dijo que será un excelente jugador y que siga adelante. Ugarte no se equivocó, ya que vaticinó el destino del gran “crack” celeste.

Tras su paso al Insef, Avilés dejó Aurora y alcanzó en Litoral su primer título: en 1972 conquistó la corona de la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP).

En el Tricolor tuvo como compañero a Ricardo “Tano” Fontana, más adelante figura de The Strongest.

Finalizó su carrera en Tránsito de Cochabamba y comenzó a ejercer como profesor desde 1976. Dio clases en 15 unidades educativas y hace cinco años se jubiló. También se inclinó hacia el básquetbol, luego de fundar una escuela que funcionó en la zona del Castillo.

Actualmente, Avilés cuenta con todos los recuerdos plasmados en un álbum de fotos y recuerdos que su papá (Walter Avilés) hizo para preservar los momentos más importantes de su hijo Tito.

Además, muchos de estos cuadros, camisetas y otros recuerdos de su vida deportiva están en su sala, su museo personal y cuyos invitados se llenan los ojos de recuerdos y anécdotas.

Recientemente tuvo un gran gesto con el equipo de sus amores: recaudó 5.000 bolivianos y los donó a las divisiones menores del Equipo del Pueblo.



HOJA DE VIDA

Tito Avilés Quintela

Lugar y fecha de nacimiento: Cochabamba, 30 de abril de 1950
Padres: Walter Avilés (+) y Marina Quintela (+)
Esposa: Zaida Medrano (+), Margarita Valencia
Hijos: Patricia (43), Marcelo (42), Rolando (26) y Marcio (23)
Hermanos: Gaby, Iván, Carmen y Walter (+)
Profesión: Profesor de Educación Física
Deportes: Atletismo y fútbol
Clubes: Aurora, Litoral y Tránsito

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