El muchacho, hincha aurorista desde que abrió los ojos, espera inquieto que su padre continúe con el relato del equipo ‘celeste’. Su progenitor lo arropó en la cama, prendió la luz tenue y comenzó con la historia.
En aquellos años 1960, 1961, 1962 y 1963, Aurora tenía uno de los mejores equipos de Bolivia, gran protagonista en los campeonatos locales y nacionales. Pero en 1963, un extraño contexto rodeó el torneo del balompié boliviano. Los equipos paceños no quisieron participar del certamen clasificatorio para la Copa Libertadores, por tanto, se decidió que jueguen sólo los clubes: Bata, Wilstermann, Aurora, San José y Racing de Llallagua.
En esas épocas, se conocía muy poco de los resultados, pero según algunos relatos, desde el inicio, Aurora, Wilstermann y San José eran los candidatos al título. En su primera batalla, el “Equipo del pueblo” superó al Santo ida y vuelta, en una contienda titánica por la presión de los hinchas orureños. En la siguiente instancia jugó contra su clásico rival, al cual superó en ambos partidos por 3-1.
Según cuenta el libro de Fernando Mayorga, “Grita la Hinchada, Grita la Hinchada”, en el segundo encuentro contra el ‘aviador’, el 10 de noviembre los ‘celestes’ ganaron con goles de Jaime Herbas Jorge Villalobos y Carlos Loma. Ese día, Aurora festejó en medio de cohetes y mixtura su clasificación a Copa Libertadores de América, donde jugó contra Nacional (Uruguay) y Cerro Porteño (Paraguay).
Ese glorioso Aurora vestía de camisola celeste cielo, tenía el cuello y los ribetes de las mangas de color blanco, y un pequeño bolsillo en el pecho con una ‘A’, como símbolo institucional.
La virtud de ese equipo fue la magnífica combinación entre los jugadores jóvenes y la experiencia de las figuras consagradas de ese entonces. José Issa, arquero emblemático por la agilidad que poseía al momento de despejar los balones. En el medio campo, René Orozco fue el cerebro del equipo. El resto, Arturo Villarroel, Jorge Guzmán, Héctor Vargas, Alberto Saavedra, Jaime Herbas, Carlos Loma, Jorge Claros, Jaime Cornejo, Raúl Unzueta y Jorge Villalobos fueron los demás artífices de la estrella dorada; todos ellos dirigidos por el DT brasilero Pacífico Becerra.
Luego de los festejos vinieron los problemas, porque al no participar de ese certamen los equipos paceños quisieron desconocer el título del conjunto valluno y su pase a Libertadores, empero, una resolución del ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) confirmó que “Aurora es campeón Nacional de 1963”.
El niño se quedó entusiasmado y esperó la segunda parte de la historia. Aurora Campeón de 2008. Su padre lo miró, y sonriente le dijo: ésa fue una hazaña…
Muchos desahuciaban al ‘celeste’ al descenso, la campaña del técnico de ese entonces, Félix Berdeja no convenció y los dirigentes decidieron sacarlo. En ese momento, Julio César Baldivieso pasó de jugador a técnico. De ahí en adelante motivó al grupo y lo llevó hasta el podio de los triunfadores en noviembre de 2008, en el estadio Patria de Sucre.
En el camino los jugadores hicieron respetar la localía, tanto así, que no perdieron ninguno de sus partidos en el Capriles.
Los jugadores comentan que la virtud del equipo fue el gran compañerismo y el amor a la camiseta, porque en el certamen tuvieron que medirse contra grandes rivales.
El torneo Clausura de 2008 fue por series, Aurora integró el grupo ‘A’ junto a Blooming, Oriente Petrolero, Real Mamoré, Wilstermann y Guabirá. El ‘celeste’ valluno pasó como segundo a la siguiente instancia junto con la Academia cruceña. En semifinales superó a Real Potosí con un empate (1-1) en la ida y una victoria (2-0) en la vuelta.
En la final contra Blooming, en Santa Cruz perdió (2-0) y en Cochabamba ganó (3-0). Para el tercer partido en Sucre, una caravana de hinchas ‘celestes’ acompañaron a Aurora en su última cruzada, donde hubo empate (2-2) y en la tanda de penales (4-3) el equipo cochabambino logró su segunda estrella, ante el asombro de los cruceños quienes ya tenían toda una fiesta preparada.
Las figuras del equipo fueron: el golero Silvio Dulcich, Aquilino Villaba, Federico Bongioanni, Iván Huayhuata, Edson Zenteno, Edward Zenteno, Juan Carlos Sánchez, Vladimir Castellón, Oliver Fernández, Diego Blanco, Germán Leonforte, Julio César Hurtado, Humberto Viviani y Aldo Gutiérrez.
El niño quedó dormido con una sonrisa dibujada en el rostro, su padre se levantó, lo besó en la frente y le dijo: Esta historia ahora tú la contarás a tus hijos, apagó la luz y se retiró.
OPINIONES
José Issa. Exjugador Aurora 1963
“Recuerdo el título con mucho cariño”
“Salir campeón con Aurora y clasificar a la Copa Libertadores con un equipo de puros jugadores nacionales fue muy importante. En ese tiempo no había futbolistas extranjeros. Recuerdo ese título con mucho cariño, fue un campeonato muy duro, pero le ganamos a Wilstermann en los dos partidos 3-1. Mis compañeros fueron grandes guerreros para conquistar el título, me da mucha alegría recordar esos momentos”.
Carlos Loma. Exjugador Aurora 1963
“Fue un acontecimiento importante”
“Fue un acontecimiento muy importante para todos en Aurora. Fue el primer título, lo recuerdo con mucha alegría. Los partidos contra San José fueron extraordinarios, especialmente en Oruro, porque sus hinchas metieron mucha presión, incluso el encuentro fue interrumpido varias veces. La FBF reconoció de forma legítima el título de Aurora, porque los equipos paceños quisieron desconocerlo”.
Iván Huayhuata. Exjugador aurora 2008
“Fue algo inolvidable el título de 2008”
“Fue algo inolvidable, fue mi primer título. Haber marcado dos goles en la final de Cochabamba fue muy importante en mi carrera. El compañerismo, la unión dentro y fuera del campo de juego fue la virtud del equipo. Siempre pensábamos en que los partidos eran unas finales para nosotros, pero sabíamos que teníamos un rival fuerte en frente. Con Julio Baldivieso trabajábamos fuerte, pero era divertido porque teníamos un objetivo claro”.
Edson Zenteno. Exjugador aurora 2008
“La gente no nos abandonó nunca”
“Un título muy importante para Aurora, estábamos a punto de descender. La gente no nos abandonó en ningún momento. Julio Baldivieso hizo todo para que salgamos campeones. Fue muy importante el compromiso y el amor a la camiseta. En esa época estábamos jugadores que le teníamos mucho cariño a Aurora. Teníamos hombres guerreros en el campo de juego”.
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